David Levin, cofundador de la famosa red de escuelas intermedias charter “KIPP” de Estados Unidos, que fomentan el estudio intensivo por parte de estudiantes de bajos recursos logrando que obtengan muy altas calificaciones para ingresar a la alta secundaria y a la universidad, encontró que sus ex alumnos tendían a abandonar los estudios superiores graduándose solamente 33% al cabo de los 4 años del primer título universitario. Si bien seguía siendo superior al 31% del promedio nacional y 8% del promedio del quintil más bajo, estaba muy lejos de su meta de graduar al 75% de los egresados.

Levin encontró algo curioso: los alumnos que se mantenían en la universidad no eran los que tenían las mejores notas en el colegio, sino los que evidenciaban tener muchas fortalezas de carácter, como optimismo, perseverancia e inteligencia social. Eran aquellos que rápidamente se recuperaban de cualquier traspié sin quedarse atados a sus fracasos. Podían tolerar dejar de ir al cine para terminar sus trabajos, o mantenerse optimistas pese a los líos en el hogar ó pedir a los profesores trabajos adicionales para recuperar sus malas notas. En suma, encontró que si bien el C.I. era un buen predictor de los puntajes de las pruebas nacionales de logros de aprendizaje, los mejores predictores de la permanencia en los estudios superiores eran los indicadores relevantes del carácter.

Es decir, tenía más relevancia el trabajo duro, valiente y perseverante en búsqueda de un objetivo, como por ejemplo en el caso de un atleta que se esfuerza y entrena duramente, se foguea en competencias en las que a veces gana y otras pierde, supera sus frustraciones, sigue para adelante sin rendirse, hasta llegar lo más cerca posible del logro aspirado. Esa no es la experiencia que se llevan consigo gran cantidad de estudiantes a los que “les viene fácil” el logro académico por sus ventajas intelectuales genéticas, pero que se esfuerzan poco en cultivar su excelencia. Esas personas, cuando enfrentan algo que realmente les resulta difícil, se achican y rinden, porque no están acostumbradas a ese tipo de experiencias.

Sobre este tema Paul Tough publicó el 14/9/2011 un interesante artículo en el New York Times “What if the Secret to Success Is Failure?” reseñando una reveladora entrevista con el innovador educador Dominic Randolph, del reputado colegio privado Riverdale Country School, así como los trabajos de los psicólogos positivistas Christopher Peterson y Martin Seligman autores del cuestionario de “Fortalezas y Virtudes del Carácter” (U. Oxford, 2004)

Randolph y Levin hablaron con Peterson para discutir cómo la monumental obra que él había hecho con Seligman podría usarse en la escuela. Los autores habían revisado cientos de trabajos escritos a lo largo de la historia en diversas culturas sobre el carácter de las personas. Abarcaron desde Aristóteles hasta Confucio, pasando por la Biblia e incluso los manuales de los Boy Scouts. Encontraron 24 fortalezas del carácter comunes a todas las culturas en todas las épocas.

La lista incluye 5 fortalezas cognitivas (curiosidad, amor por el conocimiento, pensamiento crítico, inteligencia práctica, perspectiva); 4 fortalezas emocionales (valentía, perseverancia, integridad, pasión por las cosas); 3 fortalezas interpersonales (capacidad de amar y ser amado, generosidad, inteligencia Social); 3 fortalezas cívicas (trabajo en equipo, sentido de la justicia, liderazgo); 4 fortalezas que protegen contra los excesos (capacidad de perdonar, humildad, cautela, auto-control); y 5 fortalezas que forjan conexiones con la inmensidad del universo y proveen de significado a la vida (apreciación de la belleza, gratitud, optimismo y proyección hacia el futuro, sentido del humor, fe)

Randolph, Levin y Peterson trataron de hacer esta relación de fortalezas más reducida y práctica para fines escolares, afinaron la lista de 24 y la redujeron a 7 principales ítems: pasión, valentía, auto-control, inteligencia social, gratitud, optimismo (con proyección al futuro) y curiosidad (e interés por el mundo)

Su hipótesis fue que si la escuela cultiva esas fortalezas de carácter a través de todas sus actividades y estrategias pedagógicas, estarán ayudando a los alumnos a construir los pilares para tener una buena vida, que no sólo sea feliz sino también significativa y relevante.

Los resultados están por verse porque aún hay una tendencia mayoritaria a mantenerse dentro de los cánones educativos académicos tradicionales a los que aún no ingresan con seriedad conceptos como acogida, bienestar socioemocional, habilidades blandas, inteligencia emocional, apoyo psicológico y psicopedagógico individualizado, pero si alguien quiere sumarse a los ensayos para promover la innovación en la educación, o quiere identificar colegios que estén innovando con una visión centrada en el bienestar de los estudiantes, este artículo le puede darle una pista sobre el camino a seguir.

En FB 2011: https://www.facebook.com/leon.trahtemberg/posts/952667684833767?pnref=story

Replicado el 04 02 2021 en FB: https://www.facebook.com/leon.trahtemberg/posts/3679034805530361

https://www.facebook.com/leon.trahtemberg/posts/pfbid02i3zuSRCd8t5gC2A6DMYCPKu5Uoh64AxttyTRqEB8eByUeLSfudyJTfxVYecquYVwl

Artículos afínes:

 

Este es el signo número uno de alta inteligencia, según Jeff Bezos

 

Vídeo inspirador afin ¿Hacia cuál de las actitudes educamos mayoritariamente en el Perú? ¡A ser individuos diferenciados o ser corderos que se dejan llevar por la mancha? Hidden camera social experiment proves most people are sheep

Una columna afín que levanta alertas «Es la educación, estúpido» (Por Anwar Moguel, México). Hoy vi éste artículo sobre los dramas de la sociedad mexicana. ¿Es casual que parezca haberse escrito para calzar con el Perú y cualquier otro país de América Latina? ¿No será que «alguien» nos ha lavado la cabeza para desconectar la escuela de la vida real y hacernos creer que un periodico retoque curricular con pruebas aggiornadas producirá egresados mejor educados? Quizá ya sea hora de empezar a pensar que la buena educación no pasa por pontificar resultados en pruebas censales o PISA sino en tener una imagen de persona bien formada y educada en términos de actitudes y conductas frente a temas de la vida cotidiana que los peruanos quisiéramos transformar, y hacer de eso la médula de nuestro proyecto educativo. FB: https://www.facebook.com/leon.trahtemberg/posts/954480861319116?pnref=story

Enseñe a sus hijos a fracasar. Ponerse cómodo con los contratiempos los mantendrá curiosos y comprometidos.

Mitos sobre los niños superdotados Es imprescindible desmontar las falsas creencias a fin de transmitir un acercamiento más real sobre cómo son estos menores. Por ejemplo, si se quiere evaluar el nivel educativo del colegio ABCDE ¿qué datos usa normalmente tanto el Minedu como muchos analistas? Los resultados de las pruebas censales, el % de ingreso a la universidad, y eventualmente la tasa de promoción o repitencia de los alumnos. ¿Qué nos dice eso de cómo son y serán esos alumnos como personas eticas, sensibles al prójimo, con alta autoestima, con una autoimagen de personas valiosas, capaces de ser miembros constructivos de su comunidad; qué nos dice de su nivel de tolerancia a la diversidad, su capacidad decresolver conflictos sin violencia, de ofrecerse voluntario para trabajo solidario y para conciliar cuando sus compañeros están conflictuados; qué nos dice de su autodisciplina y nivel de regulación personal wue le permite distanciarse de los vicios y asumir una sexualidad responsable… Dirán que eso es difícil de evaluar. Pero por ello es que hay que opacarlo frente a lo que es menos decisivo pero más fácil de evaluar de modo estandarizado e informatizado?

Más que inteligencia necesaria para el éxito en la vida. La investigación llevada a cabo en la Universidad de Adelaide y la Universidad de Bristol ha examinado las creencias de larga data de que el éxito en la escuela y en las carreras profesionales se debe a algo más que la alta inteligencia. Las habilidades no cognitivas también son importantes.

La tragedia silenciosa que afecta a los niños de hoy The silent tragedy affecting today’s children En los últimos 15 años: 1 de cada 5 niños tiene problemas de salud mental; 43% de aumento en TDAH; 37% de aumento en la depresión adolescente; Aumento del 100% en la tasa de suicidio en niños de 10 a 14 años; Criar una generación saludable en un ambiente insalubre. Los niños pagan con su bienestar emocional por la pérdida de la infancia bien equilibrada. ¿Qué está mal? La privación de padres emocionalmente disponibles, límites y orientación claramente definidos, responsabilidades, nutrición equilibrada y sueño adecuado, movimiento al aire libre, juego creativo, interacción social, oportunidades para tiempos no estructurados y aburrimiento. Niños interactúan con padres digitalmente distraídos, padres indulgentes que les permiten «gobernar el mundo“, sentido de derecho en lugar de responsabilidad, sueño inadecuado y nutrición desequilibrada, estilo de vida interior sedentario, estimulación sin fin, niñeras tecnológicas, gratificación instantánea y ausencia de momentos aburridos

Más educación emocional Luz Amparo Martínez 26/05/2017 “Las habilidades en inteligencia emocional se traducen en que un docente es capaz de mirar, escuchar y entender las necesidades de un alumno. «Puede parecer obvio, pensar que todos los maestros tratan así a los chicos, pero no todos lo hacen. Nadie está dispuesto a reconocer el abandono emocional». La comprensión y gestión de las emociones como un factor clave en el desarrollo de niños y jóvenes.

Richard Gerver: “Hay demasiadas modas pasajeras en la educación”.Las escuelas se centran demasiado en lo académico. En España o Inglaterra los exámenes son la razón de ser de la escuela. Esto tiene que parar. La educación no va de aprobar exámenes, sino de desarrollar a los jóvenes para que tengan éxito. Los profesores no necesitan los exámenes para eso. Seamos serios. Están evaluando a sus alumnos todo el tiempo. Los exámenes existen porque les gustan a los políticos y los piden los padres. Pero, en realidad, como herramienta, obstaculizan la educación, no la mejoran. La OCDE señala que los países con sistemas que se centran en exámenes son en los que los chicos tienen más dificultades para encontrar un trabajo. Esto se debe a que la educación no está enfocada a su desarrollo, sino a prepararlos para un examen.

Más de 100 años resistiendo la escuela tradicional. El Tiempo, 26 04 2018 Óscar Sánchez Muy descriptivo e ilustrativo. Habla de Colombia pero en América Latina todos nos parecemos tanto…Lo que es increíble, es que en Colombia el Ministerio de Educación y algunos sectores del magisterio sigan yendo en contravía, proponiendo parámetros y horarios milimétricos, infraestructura medida en número de aulas convencionales, énfasis en competencias básicas y evaluaciones estandarizadas limitadas en su contenido o métodos represivos como la reprobación de cursos a quien no obtenga logros establecidos en un plan de estudios rígido. Y que ejemplos de iniciativas docentes maravillosas para llevar esta nueva pedagogía al sistema público que florecen en muchas escuelas, o políticas ampliamente reconocidas por haberlo hecho, sigan teniendo audiencias limitadas.
Un efecto secundario inquietante de la alabanza. A Troubling Side Effect of Praise (Edutopia) Los jóvenes estudiantes que son elogiados por ser inteligentes tienen más probabilidades de hacer trampa, según encuentra un estudio reciente. (LT: lógico, porque temen que las próximas veces si fallan pierdan el reconocimiento por su inteligencia)