Correo 11 10 2013

¿Por qué anunció el presidente Ollanta Humala la creación del Ministerio de Ciencia y Tecnología fuera del Perú, en su viaje a la APEC? Para no sentirse acomplejado entre los países asiáticos que tienen como motor de su desarrollo la C y T e Innovación. Me hizo recordar a Alberto Fujimori que en China anunció la creación del Ministerio de la Mujer (PROMUDEH-1996) cuando asistía a la cuarta cumbre mundial de mujeres de Beijing 1995 (Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables desde el 2012).

También Alan García creó sus ministerios para quedar bien. El del Ambiente lo creó en el 2008 durante la realización de la V Cumbre América Latina, el Caribe y la Unión Europea realizada en Lima. Antes de terminar su quinquenio creó el Ministerio de Cultura en el año 2010 para institucionalizar el tratamiento de la interculturalidad y las industrias culturales.

Ojalá algún presidente peruano viaje a alguna cumbre de la Infancia en Noruega y se inspire en el Real Ministerio Noruego de Infancia e Igualdad para crear un Ministerio de la Infancia en el Perú.

No creo que se deba descalificar un ministerio por la burocracia que requerirá. Si así fuera, mejor cerrar el ministerio de trabajo, interior o economía.

Los ministerios encarnan los sectores prioritarios del país. En el Perú, la iniciativa tiene sentido porque el ministro tiene un asiento en el gabinete y puede llevar la voz de su sector. C y T necesita un padrino, un vocero al más alto nivel. Aunque le asignen alguito, y lo escuchen una vez cada dos meses, eso ya es más que todo lo que ha tenido en la historia del Perú. Ya que la mayoría de los gobernantes que ha tenido el Perú han sido abogados o militares, con fuerte influencia de los economistas y empresarios, es hora que haya algún sector científico cuya cabeza sea un ingeniero o científico como ocurre usualmente en China y los países desarrollados y emergentes de Asia.

Hace tiempo que debería haberse creado el Ministerio de la Infancia y el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, dos prioridades nacionales urgentes.

Curiosa coincidencia de columna publicada el mismo día en otro diario
Solo un asiento en el Gabinete, con voz y voto político, y antídoto contra la ignorancia supina y la indiferencia de los políticos dará la pelea para el verdadero salto al siglo 21.