La encuesta “The National Geographic–Roper 2002 Global Geographic Literacy Survey” hizo 56 preguntas sobre cultura general geográfica a más de 3,000 jóvenes de 18 a 24 años en Canadá, Francia, Alemania, Gran Bretaña, Italia, Japón, México, Suecia y los Estados Unidos. Los de Suecia fueron los mejores y los de EEUU y México los de peor desempeño. Pese al bombardeo de noticias sobre el Medio Oriente y Asia Central, en vísperas del ataque norteamericano a Irak, el 83% de jóvenes norteamericanos y 90% de los mexicanos no pudieron encontrar en el mapa a Irak, Afganistán ni Israel. Cerca del 30% de los norteamericanos y 26% de los mexicanos no pudieron ubicar el océano Pacífico; 56% de los norteamericanos no pudieron ubicar a India y 11% ni siquiera pudo localizar a los EEUU en un planisferio. Entre 60% y 80% fallaron en ubicar Japón, Francia, Inglaterra y Suecia, obteniendo los mexicanos puntajes más bajos aún. Daría la impresión que en general la población mundial padece de analfabetismo geográfico. El conocimiento de geografía depende de los aprendizajes escolares, los viajes internacionales, el dominio de idiomas extranjeros y el acceso a internet. Por ejemplo los norteamericanos con acceso a internet respondieron 65% mejor. No menos del 70% de los alumnos de Suecia, Alemania e Italia habían viajado por el mundo y hablaba más de un idioma comparado con el 20% de los mayoritariamente monolingües de EEUU y México. Recordemos que la geografía estudia el desarrollo evolutivo y la organización humana sobre la superficie terrestre, el medio ambiente, la interdependencia entre lugares, las representaciones espaciales, las escalas, y la manera cómo se interrelacionan en el espacio los fenómenos físicos y humanos, creando lugares o regiones con características naturales o sociales distintivas. Estudia la influencia que tienen esos lugares en una amplia gama de eventos y procesos naturales y humanos. Así la geografía puede apoyar el estudio de la economía, degradación ambiental, conflictos étnicos, cuidado de la salud, cambios climáticos, antropología, epidemiología, ecología, conservación de la biodiversidad y relaciones internacionales. Si se reconociera que el bienestar nacional está relacionado con el mercado global y los desarrollos políticos internacionales, así como los temas del medio ambiente y el uso cada vez más intenso de imágenes gráficas, mapas y otros diagramas espaciales usados en las computadoras y las telecomunicaciones, la renovada geografía podría ser redescubierta como una disciplina escolar esencial.