Algunas ideas reaccionarias sobre la enseñaza de la historia fijan límites acerca de la cantidad de tiempo que debe pasar para reflexionar sobre el pasado (algunos dicen 50 años). Para muchos, esa no es más que una forma de no pensar el presente.
El problema surge cuando es necesario enseñar acerca de procesos inacabados, como el tema del terrorismo en el Perú. Sin embargo, la indiferencia nunca es la mejor salida. Como recuerda el psicólogo Roberto Lerner, lo más importante es plantearse las preguntas. Él y el educador León Trahtemberg, separadamente, afrontan los distintos enfoques que se pueden tener sobre las repercusiones emocionales y pedagógicas producto del proceso de reconciliación.

1. ¿Cómo explicarle a un joven qué fue Sendero Luminoso?
Yo no veo problemas para decirle a los alumnos que SL fue un agrupación de terroristas que causaron muchas muertes y daños al país. Lo mismo respecto a Pol Pot, Jihad, Al Qaeda, etc. Tampoco tengo problemas para reconocer que a veces las fuerzas del orden cometen excesos que deben ser censurados y castigados. En realidad, todo aquel que comete una falta, este en el lado que esté, debe ser detectado y castigado. Lo que me es más difícil de explicar es cómo un grupo terrorista se convierte en un interlocutor para la paz. Por ejemplo las FARC, IRA, Hamas o la OLP; aún tratando de entender sus motivaciones, no se pueden justificar los crímenes. En esos casos solo queda tratar de entender el costo beneficio de perpetuar un conflicto o en cambio girar hacia la paz, así sea a un altísimo costo ético y emocional. Aquí juega un rol central la confianza que coloca una nación en sus líderes para que tomen estas decisiones difíciles y dolorosas con sabiduría, sabiendo que sus hijos y la historia los juzgarán.

2. ¿Cómo se debería enfocar el tema ahora, cuando se ve por TV a los líderes de organizaciones terroristas «pidiendo perdón» a la sociedad?
Hacerlo como en el día de las elecciones. Tanto antes de conocer el resultado como especialmente después se arman paneles de analistas que desde todos los puntos de vista analizan las causas y consecuencias de las victorias electorales de unos y las derrotas de otros, así como las implicancias futuras de esos resultados. Del mismo modo, creo que los vídeos de esas disculpas de los terroristas debieron ser continuados por una análisis multidisciplinario del tema, incluyendo psicólogos que les hablen a los niños y les expliquen qué es lo que pasó. Sería ideal que los vean junto con sus profesores para que luego puedan expresar sus sentimientos, pareceres y hacer todas las preguntas que quieran. Quizá la CVR pueda editarlos y proveerlos a los colegios con algunas guías para los profesores que necesiten orientación.

3.¿Cómo se debe manejar la educación después de un conflicto grave?
Los herederos de un pasado lamentable o vergonzante, como los alemanes de post guerra, los chilenos del post Pinochet o los peruanos post SL, tienen que estudiar y conocer la verdad aunque sea dolorosa. Eso tendrá valor formativo si da lugar a reflexiones, cuestionamientos y confrontaciones con los hechos. Pero esto sólo tendrá un valor preventivo si es que no nace del deseo de rencor o venganza, sino de la búsqueda de la justicia y la paz social presente y futura. Entonces se podrá tratar de vacunarse contra estos regímenes. Lo contrario es como esconder una herida abierta que aunque no la veamos, seguirá sangrando de mil maneras y encarnándose en rencores, deseos de venganza, conflictos, reclamaciones violentas y demás.