La presión de grupo, la mala escolarización y la biología pueden contribuir a la respuesta. Por León Trahteberg
En todo el mundo, las niñas tienen más probabilidades que los niños de no recibir educación alguna. Pero una vez que están en el aula, a los niños generalmente les va peor. El abismo es mayor en la lectura: en casi todos los países que recopilan datos suficientes, las niñas son mejores lectoras que los niños a los diez años. Los niños también van a la zaga en las pruebas internacionales de ciencias y en su mayoría han perdido una ventaja de larga data en matemáticas. A nivel mundial, los colegios y universidades ahora matriculan sólo 88 hombres por cada 100 mujeres. Estas tendencias han sido más marcadas durante mucho tiempo en los países ricos, pero son cada vez más visibles también en los países pobres, tal vez porque los obstáculos que durante mucho tiempo frenaron el avance de las escolares están siendo derribados gradualmente. ¿Por qué a los niños les va mal en la escuela?

El artículo discute varias razones detrás del rendimiento académico comparativamente más bajo de los niños en comparación con las niñas a nivel global. A pesar de que las niñas tienen más probabilidades de no recibir educación, una vez en el aula, superan a los niños, especialmente en lectura y ciencias, y cada vez más en matemáticas.
Una razón destacada es el ambiente cultural que desvaloriza la educación para los hombres, basándose en las ventajas que los hombres ya tienen en el mundo laboral y la representación insuficiente de la educación como una actividad «varonil» en la cultura popular. Además, los padres tienden a dedicar menos tiempo a la lectura con sus hijos que con sus hijas.

Las escuelas también juegan un papel, con una notable falta de profesores masculinos que sirvan como modelos a seguir para los niños, en especial en regiones como Oriente Medio. Los niños experimentan tasas más altas de acoso y violencia en la escuela, lo que aumenta las probabilidades de abandono escolar.

El ritmo diferente de desarrollo biológico entre niños y niñas es otro factor potencial, con sugerencias de que adaptar el comienzo y la finalización de los estudios de los niños para alinearse con su desarrollo podría beneficiarlos.

El rendimiento académico bajo tiene consecuencias significativas, incluyendo altas tasas de repetición de años escolares y un mayor riesgo de involucrarse en actividades criminales. A pesar de los desafíos significativos que enfrentan los niños, los esfuerzos para abordar estas cuestiones son raros, con solo cuatro de los 19 países identificados por la UNESCO con problemas graves implementando políticas para remediar la situación.

https://www.economist.com/the-economist-explains/2022/11/23/why-are-boys-doing-badly-at-school